Bodas de diamante

En el ocaso de una vida hay cosas que todavía pueden dar un vuelvo al corazón. Hoy, acompañados de vuestros familiares y amigos, podréis sentiros orgullosos de todo lo que habéis conseguido el uno junto al otro. Paso a paso, luchando contra adversidades y compartiendo vuestras alegrías, os convertisteis en mejores personas. Aprendisteis el significado de compartir, de amar, de confiar, de sonreír, de fracasar.

Juntos, día a día, fuisteis testigos de cada nueva arruga y de cada cana, sin perder en ningún momento la ilusión y la esencia que os hace tan únicos. Para demostrarle lo mucho que esto ha significado para ti, regala unas flores y un anillo de diamantes a tu pareja junto a unas frases que le hagan sentir, de nuevo, como un chiquillo que mira embelesado a su primer y único amor.

Frases para bodas de diamante

Habéis ganado el privilegio de celebrar los 60 años de matrimonio, entregando cada día lo mejor de vosotros. Hoy se festejan vuestras bodas de diamante, conmemorando un amor inalterable, honesto y generoso. Es emocionante observar vuestra unión y el orgullo que sentís por el largo camino recorrido. Recibid nuestra más ferviente admiración y los más sinceros deseos de merecida felicidad y amor eterno.
Durante 60 largos y bellos años hemos caminado juntos de la mano por los senderos de la vida. Durante este tiempo hemos reído y hemos llorado, hemos sufrido ausencias y hemos dado la bienvenida a nuevas vidas. Todo ello hubiese sido imposible sin tu presencia ya que supiste dar lo mejor de ti como persona y contagiarme de tu vitalidad y optimismo. Gracias amor mío.
Después de toda la vida juntos, vuestro amor ha superado tantas pruebas, errores y aciertos, tantas risas y lágrimas, ha resultado ser tan fuerte, consolidado y flexible, es tan sumamente poderoso... que solo se puede esperar que venza a la muerte y viváis felices para toda la eternidad.
Vuestra excepcional unión cumple hoy 60 años de vida. Celebráis vuestras bodas de diamante rodeados del afecto de la maravillosa familia que creasteis con devoción y sacrificio. El amor del primer día ha crecido inmensamente hasta transformarse en un vínculo solo accesible a unos pocos escogidos. Disfrutad de la dicha de este logro y recibid nuestras más sentidas felicitaciones.
Fui feliz cuando te encontré y soy feliz por seguir unido a ti después de toda una vida. Han transcurrido 60 años desde que pronunciamos nuestros votos y parece que fue ayer. Quiero recordar en este aniversario la maravillosa vida que hemos compartido y, como fruto de nuestra unión, agradecer a nuestros hijos y nietos todo el amor que nos han brindado.
A los veinticinco años de matrimonio te preocupa la rutina, que la plata no ennegrezca y conserve su brillo para siempre. A los cincuenta años de matrimonio, te preocupa la familia y el devenir de nietos e hijos, y el oro reluce por la casa en forma de risas y rizos de bebé. A los sesenta años de matrimonio no te preocupas, lo que deseas es descansar el diamante de tus sienes sobre el hombro de la mejor persona que has conocido en tu vida para recordar las risas de bebé, la luna plateada y todos los momentos de felicidad compartida.

Poemas para bodas de diamante

Mirarte en este momento a los ojos
y ver a quien me ha acompañado en la aventura
que es la vida durante 60 años
supone un regalo del cielo
un sueño cumplido de aires divinos.
Pero el tiempo a tu lado pasó volando
y yo me sentí flotando día a día
pasando cada adversidad de tu mano
soñando junto a ti y despertando
con sonrisas y caricias,
haciendo virtud las imperfecciones
que alguna vez pudieran aparecer.
Mirarte en este momento a los ojos
es un regalo, es magia, es gozo.
Tras toda una vida juntos compartiendo
momentos buenos y menos buenos,
el dulce néctar de los besos,
abrazos diarios de suave terciopelo.
60 años después te vuelvo a decir te quiero
con la misma intensidad del primer día
con toda mi alma que sin ti estaría vacía.
Hoy hacemos verdad lo que de jóvenes soñamos,
afirmando mucho tiempo después que nos amamos.
Soñé en mis días juveniles
que encontraría a mi alma gemela,
que soñaría cada noche a su lado
despertando con sus caricias gentiles,
experimentando junto a ella la vida
surcando día a día hasta el final.
En esta parada del camino
miro a mi lado y encuentro tu mirada,
la que siempre me ha acompañado
mirándome con la dulce ternura
que tanta felicidad me ha dado.
Pero más cariño tengo para ti todavía
no me canso por mucho que pasen los días.
525.600 horas
21.900 días
3.128 semanas
720 meses
60 años
y no me canso de quererte con todo mi corazón
y no me olvido cada día de darte un abrazo
y no imagino mi vida sin despertar a tu lado
y no comprendo la vida sin llevarte de mi mano.
Ya pudieran ser otros 60 años más
nuestros corazones seguirán siempre unidos
para la eternidad.